El último contraste de resultados de los informes que revelan el nivel educativo mundial


PISA sitúa a los alumnos españoles a la cola en habilidades prácticas 
Programar un aparato de aire acondicionado, escoger la mejor combinación de metro para llegar a otro punto en una ciudad que no se conoce o predecir el comportamiento de un robot de limpieza en una habitación. Los estudiantes españoles de 15 años están 23 puntos por debajo de la media de los países desarrollados en la resolución de estos y otros problemas cotidianos, según el informe PISA (Programa Internacional de Evaluación de Estudiantes) de la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos). El estudio, que ha evaluado a 85.000 jóvenes de 15 años de 44 países —en España participaron 2.709 estudiantes— revela que los alumnos españoles están aún peor preparados para enfrentarse a la vida diaria de lo que revelan sus resultados en matemáticas, ciencias o capacidad lectora (y tampoco en ello alcanzan la media de los países desarrollados).

Este estudio revela que los adolescentes españoles no están preparados para enfrentarse a la vida diaria (tampoco alcanzan los niveles medios en matemáticas, ciencias o capacidad lectora). Se demuestra que los alumnos no saben aplicar lo aprendido, no utilizan lo aprendido en clase para la vida cotidiana.

Esto puede suceder porque el gobierno se ha dedicado a cambiar y adaptar el curriculum para mejorar las capacidades informáticas, las capacidades para la vida, pero no ha enseñado a los profesores a transmitir dicho conocimiento, no ha enseñado al profesor a usar las nuevas tecnologías en el aula. Si el profesor no sabe o no usa las nuevas tecnologías en el aula, el alumno no aprenderá a utilizarlas correctamente en su vida cotidiana. Es posible que los centros  no han sabido aplicar la enseñanza de resolución de problemas a los alumnos, por eso estos han tenido una calificación tan baja. 

FUENTE: El País